250 gr de pechuga de pollo.
Un pimiento verde.
Un pimiento rojo.
Un pimiento amarillo.
2 rodajas de piña natural.
Una cebolla.
50 ml de vinagre.
50 ml de salsa de soja.
Una cucharada de miel.
Una cucharadita de harina de maíz.
Un huevo, harina y pan rallado.
Sal y aceite de girasol.
Preparación.
Cortamos la pechuga de pollo en tiras no demasiado grandes, y las ponemos a macerar con el vinagre, la soja, la miel y la sal, durante seis horas.
En una sartén ponemos un poco de aceite de girasol y rehogamos las verduras no demasiado para que queden al dente.
Añadimos la piña y rehogamos un par de minutos más. Reservamos.
Ahora vamos a por el pollo. Secamos las tiras con papel de cocina, a continuación las pasamos por harina, huevo y pan rallado. Ponemos aceite en una sartén y las freímos, por último quitamos el exceso de aceite con papel de cocina.
Para la salsa agridulce utilizaremos el liquido resultante de la maceración del pollo.
Diluimos en un poco de agua la cucharadita de harina de maíz, y en un cazo la ponemos junto al liquido de la maceración.
Calentamos a fuego lento sin dejar de mover hasta que quede un poco espesita.
Por último ya solo queda emplatar.